R.·.L.·.S.·. ISPAL 125 - SEVILLA
Sevilla y la masonería
La masonería en Sevilla se remonta a la Edad Media, cuando los gremios de constructores y albañiles comenzaron a dejar su huella en la ciudad. Desde entonces, ha evolucionado desde una masonería operativa, centrada en la construcción, a una masonería especulativa, dedicada al desarrollo ético y filosófico.
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Orígenes históricos: Masonería operativa
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Los primeros indicios de masonería en Sevilla están vinculados a los maestros albañiles que trabajaban en la construcción de grandes edificaciones, como la Catedral de Sevilla. Estos gremios guardaban celosamente los secretos técnicos de su oficio, dejando marcas en las piedras para identificar su participación. Por ejemplo, en la Puerta de San Miguel de la Catedral se encuentran marcas atribuidas al maestro masón Juan de Normandía. Esta etapa inicial es conocida como masonería operativa y estaba profundamente ligada al arte de la construcción.
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Transición hacia la masonería moderna
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La masonería moderna en Sevilla comenzó a documentarse en el siglo XVIII. En 1771 se registraron las primeras logias especulativas, que ya no estaban vinculadas a la construcción física, sino al perfeccionamiento moral e intelectual. Estas logias atrajeron a figuras destacadas de la vida sevillana, como Diego Martínez Barrio, quien fue presidente de la Segunda República Española y Gran Maestre de la Gran Logia de España.
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Durante el siglo XX, incluso bajo el franquismo, algunas logias permanecieron activas en Sevilla. En los años 1920 y 1930, la masonería tuvo un papel destacado en la vida política local, con varios alcaldes y concejales pertenecientes a esta fraternidad
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Nuestra logia
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La Logia Ispal opera bajo el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, uno de los ritos masónicos más extendidos y respetados a nivel mundial. Este rito se caracteriza por su estructura de 33 grados, siendo los primeros tres parte de la Masonería Simbólica, que se enfoca en el desarrollo moral e intelectual de sus miembros.
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La logia se guía por los principios de fraternidad, tolerancia y búsqueda del progreso social. Busca fomentar el intercambio de ideas y la unión de pensamientos diferentes, promoviendo la concordia y el desarrollo personal de sus miembros.
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La Logia Ispal está formada por profesionales de diversas áreas, incluyendo profesores universitarios, técnicos de la administración, funcionarios, etc.
¿Qué es la masonería?
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La Masonería es una institución con una rica historia de aproximadamente tres siglos, dedicada a promover el desarrollo moral e intelectual de sus miembros y de la sociedad en general. Su objetivo principal es fomentar la fraternidad universal, basándose en principios de armonía, verdad y amor fraternal. Esta fraternidad busca constantemente el progreso y la libertad, estudiando las leyes de la naturaleza para ser útiles a la humanidad y contribuir a su perfeccionamiento.
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Podríamos considerarla como una institución que encarna la moralidad más pura, orientada a combatir la ignorancia y el vicio, y a inspirar amor por la humanidad. Sus fundamentos se basan en la moral universal y la ley natural, guiadas por la razón y definidas por la ciencia. Un principio fundamental es la creencia en el Gran Arquitecto del Universo y en la inmortalidad del alma, sin discriminar a nadie por sus creencias u opiniones, sino solo por el mérito y el demérito.
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La Masonería se enfoca en enseñar valores como la rectitud, la responsabilidad personal y la mejora moral, con el objetivo de mejorar a la humanidad a través de sus rituales y prácticas. También promueve la búsqueda de la verdad, el avance científico y la conquista de la libertad de manera pacífica y legal, manteniéndose firme contra el despotismo político y el fanatismo religioso.
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Aunque la Masonería realiza obras benéficas, no es simplemente un club ni una organización caritativa. Como asociación diversa ideológicamente, no busca influir directamente en la sociedad con una acción específica, pero sí promueve valores universales como la tolerancia, la libertad, la paz, la filantropía y la defensa de los derechos humanos. Estos valores requieren un compromiso significativo de sus miembros sin esperar recompensa alguna.
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Un aspecto interesante de la Masonería es su capacidad para unir a personas de diferentes orígenes y creencias bajo un mismo propósito, fomentando un ambiente de respeto mutuo y cooperación. Además, su enfoque en la mejora personal y colectiva ha inspirado a muchos de sus miembros a contribuir positivamente en sus comunidades, dejando un legado duradero en la historia.
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